Convocatoria de Catequistas Inspira Renovación y Misión Entre Educadores y Líderes de Fe
La Convocatoria Anual de Catequistas de la Arquidiócesis de Newark, celebrada el sábado 9 de noviembre en Paramus Catholic High School en Paramus, NJ, atrajo a más de 800 asistentes este año. La convocatoria ofreció un día lleno del Espíritu Santo, con formación, inspiración y compañerismo, destacando el papel crucial de los catequistas en la formación de la fe de jóvenes y adultos.
La participación extraordinaria incluyó a más de 700 catequistas, líderes catequéticos parroquiales, maestros de escuelas católicas y líderes parroquiales, y ofreció talleres en inglés y español. Aproximadamente 50 expositores y un número similar de presentadores contribuyeron al evento. Los asistentes, representando a 118 parroquias, resaltaron el amplio compromiso con la misión de la catequesis en toda la arquidiócesis.
El tema de la convocatoria de este año se basó en el Evangelio de Mateo 25:37, “Señor, ¿cuándo te vimos hambriento?” y se alineó con el tema del Domingo Catequético de la Conferencia de Obispos Católicos de los Estados Unidos (USCCB), sirviendo como un llamado a la acción. En este contexto, la convocatoria exploró el hambre de una relación más profunda con Dios y el papel del catequista como un corazón misionero que guía a otros hacia la luz de Cristo.
“Los catequistas son el corazón de nuestros esfuerzos de formación en la fe, y esta convocatoria es una oportunidad para que reflexionen sobre el llamado único que han recibido para servir en este ministerio”, explicó Patricia Rodríguez, directora de la Oficina para la Formación Continua en la Fe. “Se trata de reavivar su amor por el ministerio y recordarles la importancia de su misión”.
La convocatoria contó con destacados oradores principales que conmovieron profundamente a la audiencia. Julianne Stanz, autora, oradora y consultora reconocida por la USCCB, cautivó al público de habla inglesa con su conmovedor mensaje sobre el poder transformador de la fe. Stanz compartió que cuanto más decía “sí” a Dios, más veía Su toque en los corazones de los demás. Animó a los catequistas a abrazar sus historias personales como una herramienta poderosa para la evangelización, destacando que nuestros testimonios pueden inspirar a otros a encontrar a Cristo de maneras nuevas y profundas.
Igualmente impactante fue la presentación en español de la Dra. Dora Tobar, una reconocida oradora internacional y educadora cuya carisma y dedicación inspiraron a los participantes a perseverar en el desafiante pero gratificante trabajo de la evangelización. Tobar recordó a los catequistas su responsabilidad de evangelizar con palabras y acciones, centrando su presentación en el papel esencial de los catequistas en guiar a otros hacia una relación más cercana con Jesús. “Su mensaje de compasión y preocupación por los demás resonó profundamente”, dijo Rodríguez.
Los talleres bilingües abarcaron una amplia gama de temas, desde el autocuidado y la salud mental de los catequistas hasta técnicas creativas de enseñanza y apoyo a educadores de escuelas católicas que trabajan en entornos religiosos diversos. Entre las sesiones más concurridas se encontraban “Salud Mental y Trauma en las Familias y Jóvenes que Catequizamos”, “Creando Futuros Santos” (un taller sobre fomentar una cultura vocacional), “Técnicas Creativas de Enseñanza” y “Encendiendo la Fe en los Jóvenes de Secundaria”.
La convocatoria reconoció los desafíos cambiantes en la catequesis. “Diseñamos este evento para abordar las diversas necesidades de nuestros catequistas, ayudándoles a equilibrar sus roles tanto personal como pastoralmente”, dijo Gina Butler, Directora Asociada de Catequesis. El enfoque estuvo en equipar a los catequistas no solo con conocimientos, sino también con un profundo sentido de su llamado vocacional a guiar a otros hacia Cristo.
El evento de este año también introdujo una pista de desarrollo profesional para líderes catequéticos parroquiales, ofreciendo talleres personalizados para mejorar la efectividad de sus ministerios.
El día comenzó con una misa bilingüe celebrada por el Cardenal Joseph W. Tobin, C.Ss.R., Arzobispo de Newark, cuya homilía integró hábilmente el inglés y el español, reflejando la unidad de la diversa comunidad de la arquidiócesis. Sus palabras inspiraron a los asistentes a emprender el día con Cristo en el centro.
“La celebración de la misa con más de 800 personas fue un momento hermoso y unificador”, dijo Rodríguez. Los asistentes también se emocionaron al reconocer a los catequistas de larga trayectoria, aquellos con más de 20 años de servicio, y por el espíritu de camaradería que impregnó el evento.
Los participantes elogiaron el día como “vivificante” y “lleno del Espíritu”. Muchos describieron sentirse renovados en su misión, inspirados por los oradores principales y talleres a profundizar su relación con Jesús y compartir su fe de manera más efectiva. Un catequista comentó: “Me siento más seguro en mi conocimiento de las enseñanzas de la Iglesia y equipado con ideas prácticas para llevar a mi parroquia”.
La convocatoria también subrayó la vitalidad de la Iglesia en Newark. “Es alentador ver a tantos reunidos, unidos en la misión de la catequesis evangelizadora”, dijo Rodríguez.
El éxito del evento fue posible gracias al generoso apoyo de Paramus Catholic High School, que acogió la convocatoria, y los esfuerzos de cerca de 50 voluntarios de diversas parroquias. Su dedicación aseguró una experiencia impecable para todos los involucrados.
“Estamos increíblemente agradecidos por los corazones y manos que se unieron en el nombre de Jesús”, dijo Butler. La convocatoria concluyó con un compromiso renovado con la catequesis, empoderando a los asistentes a regresar a sus parroquias con un celo renovado y una fe más profunda.
Para obtener más información sobre la Oficina de Formación Continua en la Fe de la Arquidiócesis de Newark, visite www.rcan.org.
(Fotos cortesía de la Arquidiócesis de Newark/Julio Eduardo Herrera)